En nuestros pueblos, las personas consiguen inspiración y satisfacción en la práctica de su patrimonio vivo. Sin embargo, la llegada de la pandemia del COVID-19, ha provocado que eventos festivos y celebraciones tradicionales de carácter comunitario se encuentren cancelados en todo el país, ocasionando pérdidas económicas a sus pobladores y afectando su cohesión social e identidades culturales. El distanciamiento y el confinamiento físico producto de esta emergencia sanitaria, también, ha generado impacto sin precedentes en las personas comprometidas con la producción de las prácticas folclóricas de música y danza. Estudiantes, docentes, artistas, cultores, gestores y trabajadores vinculados al sector cultural que conforman el gran ecosistema artístico, que se mueve alrededor de esta dinámica laboral, serán los llamados a debatir sobre el tema.

El 27 de abril, la Escuela Nacional Superior de Folklore “José María Arguedas” inició su ciclo de actividades culturales en línea convocando a tres especialistas del sector de arte y cultura tradicional para desarrollar el conversatorio online “El coronavirus y las prácticas folklóricas: Impacto, planificación y escenarios para la poscrisis”. 

Estuvieron presentes Julia María Sánchez Fuentes, directora de Investigación de la Escuela Nacional Superior de Folklore José María Arguedas; Carlos Sánchez Huaringa, director del Centro Universitario de Folklore de San Marcos; y Daniel Díaz Benavides, miembro del Consejo Internacional de la Danza de la UNESCO, quienes analizaron la problemática que vive el sector cultural de folkloristas.